En España, la legislación sobre juego es competencia de las Comunidades Autónomas y Madrid ha abierto el plazo para la solicitud de las oportunas licencias que permitirán a las empresas operar en la Comunidad.
Según informa el diario El País, la Comunidad de Madrid tramitará las primeras licencias de juego en internet con ciertas reticencias por parte de las empresas del sector.
El problema es que dichas licencias estarán limitadas únicamente a clientes madrileños y las empresas serían las encargadas de velar porque sus servicios se destinaran únicamente a los residentes en dicha Comunidad. Un poco como ocurre con las salas de póquer y los jugadores estadounidenses, pero a la inversa. Hasta ahora, las empresas se han beneficiado de una legislación confusa que da lugar a paradojas como que el juego en internet este, por ejemplo, prohibido en España, pero la realidad camine por otros derroteros. El crecimiento económico del sector en los últimos años ha sido exponencial y el caballo de batalla de todo este asunto tiene un nombre: tributación.
Haciendo cábalas sobre el futuro del juego en internet y teniendo en cuenta que el ámbito natural de decisiones políticas y legislativas, para nosotros, es la Unión Europea â€fundada bajo el paradigma económico liberal†, no es arriesgado pensar que, antes o después, acabará existiendo una legislación común para Europa que regule de manera eficiente el juego en internet, como cualquier actividad económica de una empresa de servicios, y que estas se rijan por el tipo de fiscalidad que se determine. Hasta ese momento, los usuarios viviremos, seguramente, tiempos extraños en los que puede ocurrir cualquier cosa. Un ejemplo es la «ley seca» del póquer en Estados Unidos. ¿Seguirá Europa sus pasos?