El ministro de la Presidencia de Andorra presentó ayer a la Comissió Legislativa d’Economia del Consell General un anteproyecto de ley del juego, que tiene como objetivo regular distintas modalidades de juego, entre las que se encuentra el poker.
El documento recoge, así mismo, información sobre las políticas de seguridad, prevención y protección de colectivos de riesgo.
La Oficina del Joc andorrana ha manifestado que está trabajando para cerrar acuerdos con los reguladores franceses y españoles, con el fin de unificar mercados. Así mismo, ha comentado que el fin de la futura ley será añadir un nuevo aliciente para atraer turistas al país.
El nuevo texto legal contempla la creación de una nueva entidad, el Consell Regulador Andorrí del Joc, que será el equivalente a nuestra Dirección General de Ordenación del Juego. El nuevo organismo tendrá representantes de los ministerios de Finanzas, Salud, Interior, Economía, Turismo y Educación.
Por último, llama la atención que en el anteproyecto, el poker aparece en la categoría de juego de azar y habilidad.
De momento, no conocemos cuáles serán las condiciones fiscales de los jugadores o las salas. Lo que sí está claro es que la nueva voluntad del gobierno andorrano forzará a los exiliados españoles que allí viven, como Rubén Sánchez «Marlaca», a plantearse al menos una nueva emigración.
