Estamos acostumbrados a que por las mesas de poker desfilen todo tipo de personajes y cuando se trata de un acontecimiento tan importante como las World Series of Poker®, la proporción de jugadores no habituales se incrementa en toda la ciudad.
Acaba de celebrarse el concurso de Miss Estados Unidos en el Planet Hollywood Resort & Casino de Las Vegas y eso propició que se acercasen a las mesas todo tipo de bellezas y viejas glorias. Los viejos verdes, y los no tan viejos, disfrutaron de lo lindo sangrando por la nariz mientras la falta de concentración les hacía perder todo cuanto llevaban encima.
Una de las bellezas que atrajo las miradas de los jugadores del Planet Hollywood fue Shanna Moakler, modelo, actriz, estrella de reality show, Miss Estados Unidos en 1995 y Playmate del mes de diciembre en 2001. Su vaporoso vestido y sus botas rojas hasta las rodillas no pasaron desapercibidas.
Shanna se sentó a jugar en una mesa de 1$/2$ NLHE y enseguida fue acosada a preguntas por los asistentes, que no estaban dispuestos a abandonar el recinto sin una foto a modo de trofeo. Shanna demostró que le sobran tablas y que está más que acostumbrada a lidiar con todo tipo de moscones. Parecía incluso que disfrutaba.
No tardó mucho en salir en la conversación el nombre de Travis Baker, batería de Blink-182 y antiguo novio de Shanna. «Fo**a igual que toca», dijo ella alegremente, y uno de los presentes aprovechó para soltar el chascarrillo. «¿Qué pasa, que sólo dura 2 minutos?» «Estuve casada con él 10 años. Créeme, ese hombre era bueno en la cama».
Una vez zanjado el asunto, apareció por la mesa Vince Neil, cantante de Mí¶tley Crí¼e, pero no levantó ni la mitad de expectación. Shanna se apresuró a decir que no le gustan «los hombres con músculos. Prefiero los hombre altos y delgados, los hombres seguros de sí mismos».
Los presentes tomaron nota y borraron el gimnasio de los propósitos de Año Nuevo. Si ella hubiese dicho que le gustaban los cojos, más de uno se hubiese cortado una pierna. Las mujeres no lo tienen fácil para integrarse en las mesas y a menudo tienen que sufrir situaciones incómodas, pero me juego lo que sea a que Shanna sacó partido a tanto cazurrismo y acabó pelando a todos aquellos que pensaban que no sabía jugar al poker y que estaban inmersos en su escote en vez de en el juego.
