Nadie puede decir que la vida de Jonathan Duhamel sea aburrida.
Desde que ganó en 2010 el Main Event de las WSOP® le ha pasado de todo, bueno y malo.
Entre lo bueno, podemos destacar que suma premios en torneos en vivo por valor de 12.057.470$.
No obstante, más llamativos son los episodios negativos que ha tenido que vivir.
Muy curiosa fue la paliza que le pegaron los tipos que le robaron en su casa dinero y el brazalete de oro de las Series Mundiales, siguiendo un plan urdido por su ex-novia, Bianca Rojas-Latraverse. Muy maja la chica.
También fue noticia la tunda que le metió Martin Finger (reciente ganador del Super High Roller del EPT de Londres), con la ayuda de Viktor Blom «Isildur1», en una fiesta celebrada durante la PCA de 2012, tras responder a las provocaciones de Duhamel, yendo este bastante borracho.
Al canadiense no le sienta nada bien beber. Se descontrola mucho y desfasa. Antes de ayer fue el protagonista de un extraño alteracado con los gendarmes parisinos, durante la celebración de las WSOP® Europe.
Aunque no se conocen con precisión los detalles del incidente, me estoy imaginando una situación cómica, al estilo de Faemino y Cansado: «Si no te portas bien, te llevamos al calabozo«. Y como Duhamel no sabía lo de «que va, que va, que va, yo leo a Kierkegaard«, acabó en el calabozo…
El pro fue encontrado borracho en el estanque que hay justo delante de la puerta del Casino Barriere. El escándalo que organizó debió ser gordo, ya que fue detenido y llevado al cuartelillo más cercano de la gendarmería, donde pasó la noche, bajo vigilancia.
No es la primera vez que Duhamel tiene problemas por culpa del alcohol este año. En abril, fue detenido por la policía de Montreal por conducir ebrio y a toda pastilla a las 5 de la madrugada. Está pendiente de juicio.
No hay duda que Duhamel es un crack en las mesas. No obstante, fuera de las mesas, se pasa un poco…
