El reciente subcampeón del Main Event de las WSOP®, Jesse Sylvia, ha hablado en las últimas horas, haciendo un pequeño balance de lo que fue su actuación en la mesa final del «October 9», centrándose sobretodo en la interminable fase three-handed. Esta información la leemos a través de Assopoker.
El objetivo principal de Sylvia era «limpiar la mesa» eliminando primero a Jake Balsiger como efectivamente así sucedió. Sylvia, jugador habitual de cash (al igual que Merson), tenía la percepción de que el joven jugador americano se sentía más cómodo jugando pre-flop, de manera que su forma de contrarrestar esta situación, era aprovechar su ventaja post-flop como jugador habitual de cash:
«Es un jugador de torneos que parecía cómodo con la dinámica preflop, así que pensé que al ser un jugador de cash yo podría aprovechar mi ventaja después del flop. Supongo que Greg Merson llegó a la misma conclusión. En algún momento, llegué a limpear el 100% de mi rango«.
«Al final estaba agotado, pero mientras jugábamos no me di ni cuenta de lo largo que se estaba haciendo. Estaba completamente concentrado. Nunca hubiera imaginado que la última fase duraría 12 horas, viendo lo agresivo que fue todo el día anterior«.
Pese a que los días posteriores a la mesa final, la estrategia de Sylvia fue bastante criticada (así como el call en la última mano), parece ser que habría comentado dicha estrategia con su «coach», Vanessa Selbst, llegando a la conclusión de que ésta fue la correcta.
Como siempre pasa, para gustos, los colores. Cada uno tendrá su opinión, al fin y al cabo, en el poker, pasa como en el fútbol: todos tenemos un entrenador dentro…
