El día de Navidad de 1989, el mundo del poker se entristeció por la muerte de uno de sus pioneros, Benny Binion, el padre de las WSOP®.
Era un hombre muy peculiar, de grandes contradicciones. Pese a ser analfabeto, rezumaba sabiduría. Y a pesar de ser un genio del marketing, siempre decía la verdad. Generoso con sus amigos, amable con sus clientes y peligroso para sus enemigos, Binion era toda una institución en Las Vegas.
Binion nació en 1904 en Texas. No tuvo formación escolar debido a su precaria salud. Desde pequeño, acompañó a su padre, que era vendedor de caballos, en sus viajes, y el contacto con el aire libre le permitió fortalecer su salud.
A los 17 años se mudó a El Paso, donde empezó a tener problemas con la justicia (venta de bebidas alcohólicas caseras, robos y dos acusaciones de asesinato). Allí aprendió también a jugar, en los campamentos de los tratantes de caballos.
No obstante, no solo vio el gambling como un pasatiempo o una forma de ganar dinero, sino que también percibió claramente las oportunidades que le ofrecía la vertiente empresarial del juego.
Sus conocimientos de marketing y de los bajos fondos le permitieron en 1936 controlar la mafia del juego en Dallas, con la protección de un poderoso político local.
Y a principios de los años 40 tomó también el control de las salas de juego en Fort Worth.
En 1946, la irrupción en Dallas de la mafia de Chicago y la pérdida de su protector político -derrotado en las elecciones- empujaron a Binion a emprender una nueva aventura en Las Vegas.
Allí, Binion empezó sus negocios asociándose con el dueño de Las Vegas Club Casino. No obstante, diferencias empresariales entre ambos llevaron a Binion a abrir su propia sala de juego, el Westerner Gambling House and Sallon. Y en 1951 compró Eldorado Club y el Apache Hotel, donde abrió el Binion’s Horseshoe Casino, un reciento especializado en juegos de high stakes.
Binion destacó en el trato a los clientes. «Buena comida, buen whisky y buen juego» era su lema. El negocio iba sobre ruedas…, pero en 1953, Binion tuvo que vender su parte del casino para pagar una multa de unos 5 millones de dólares por evasión de impuestos. 4 años más tarde, su familia logró convertirse en accionista mayoritaria del Horseshoe y en 1964 consiguió recuperar el control del casino. Aun así, Benny no pudo conseguir nunca más una licencia de juego a su nombre.
La dirección del casino cayó en manos de sus hijos Jack y Ted, y las cuentas en las de su mujer, Teddy Jane. Por detrás de todos ellos, aunque de forma extraoficial, siempre estaba Benny, que entonces ya iba a todos los sitios ataviado como un vaquero.
En 1970, Binion tuvo una idea feliz. Reunir a un puñado de jugadores con la intención de jugar y elegir al mejor jugador del mundo. Fue la 1.ª edición de las WSOP® y Johnny Moss recibió el galardón.
La competición apenas tuvo eco entre el público o la prensa. No obstante, Binion, como buen visionario, presagió que las Series podían convertirse en una máquina de hacer dinero; y el año siguiente introdujo mejoras para incrementar el prestigio del título. Las WSOP® de 1971 se decidieron en un torneo freezeout de 5.000$ de entrada, que disputaron 7 jugadores. De nuevo, Johnny Moss fue el campeón.
En 1972, el evento tuvo 12 participantes y fue ganado por «Amarillo Slim» Preston. Tuvo una repercusión mediática nacional y el campeonato se elevó a la categoría de Mundial de Poker. Gracias a Amarillo, las WSOP® conectaron con el gran público y Binion siguió llevando de dólares sus arcas.
El año siguiente, las Series Mundiales fueron retransmitidas por la CBS Sports y su programa se amplió con eventos de nuevas modalidades.
La popularidad de la competición y del Horseshoe no dejó de crecer en los años 70. Ya en los 80, el hijo de Benny, Jack Binion, tomó el control del casino. Las Series siguieron prosperando y en 1987, el recinto se quedó pequeño, teniendo que habilitar mesas en casinos adyacentes, como el Golden Nugget o el Four Queens.
Entonces, la familia Binion compró el cercano Mint Casino y abrió una sala de poker permanente en el Horseshoe, que se convirtió en la capital universal del poker.
Y justo cuando Benny Binion estaba en el punto culminante de su éxito, el día de Navidad de 1989, murió por una insuficiencia cardiaca. Tenía 85 años que se le hicieron muy cortos, ya que su vida fue muy intensa.
El año siguiente, ingresó de forma póstuma en el Poker Hall of Fame.