El que es quizás el asunto más escandaloso de fraude en la historia del póquer online parece que puede estar dando sus últimos coletazos. Absolute Poker parece que puede admitir las irregularidades que han ocurrido en su sala.
Adam Small, uno de los responsables de la web PocketFives.com en cuyo forose ha venido siguiendo la polémica, afirmó ayer mediante un mensaje en el propio foro que habían recibido una llamada telefónica desde Absolute Poker confirmando las sospechas que habían salido a la luz, en los últimos meses, acerca de que su software habría sido utilizado irregularmente. AB les anunciaba que en breve emitirán un comunicado oficial explicando la situación y que uno de los puntos será la devolución de fondos a los jugadores afectados.
Estaba claro que la situación había llegado a un punto insostenible para Absolute Poker. Los casos de los bots en Full Tilt, el escándalo de las irregularidades en el evento principal de los WCOOP de PokerStars y la actitud que ambas salas tuvieron al respecto, no dejaban otra salida a Absolute Poker que afrontar la situación con valentía y establecer las oportunas medidas de resarcimiento con sus usuarios. Esta respuesta es, indudablemente, lo único que puede salvar a Absolute Poker y aún así lo van a tener difícil.
Otro punto interesantísimo de este asunto, y que sería objeto de estudio por la sociología de la informática, es como, en esta era inicial de construcción de esa mega-estructura llamada internet, las redes sociales de usuarios (foros, webs, etc…) y la tecnología aplicada sirven como mecanismo de organización y control horizontal con el poder de sacar a la luz situaciones de irregularidad en una gran empresa hasta el punto de obligarla a tomar medidas excepcionales que, de otro modo, nunca hubieran sido llevadas a cabo.