El balance de los Wynn Millions, a tenor de las cifras y los comentarios de los participantes, no podría ser más exitoso.
El torneo principal cubrió su garantizado de 10.000.000 de dólares y los más de mil jugadores que atendieron al evento se deshicieron en elogios con la organización y con el marco del torneo, la poker room del casino Wynn de Las Vegas.
En el plano competitivo, la mesa final tuvo muchos puntos sobresalientes.
El más anecdótico fue la presencia de Sean Perry, que encontró la mezcla perfecta entre los torneos High Rollers en los que está especializado y los MTTs multitudinarios en esta cita puntuable para el PokerGoTour. Fue eliminado en 8ª posición.
Tony Tran, jugador de origen vietnamita, también era de los favoritos. Le avalan sus dos títulos del World Poker Tour. Se quedó con la sexta plaza.
Tanto hablar de favoritos… Durante gran parte de la final solo había una, y muy clara, Vanessa Kade. Todo le iba rodado hasta que el futuro campeón Tony Sinishtaj le puso fe a un proyecto de color y acabó haciendo pagar muy caros los AA que le dieron de mano a Vanessa.
Cada mes de marzo, Vanessa Kade salta a las portadas. Hasta ahora, era algo tan predecible como el paso de las estaciones.
En 2020, en el día Internacional de la Mujer, GGPoker hizo oficial el fichaje de Dan Bilzerian, que nunca pierde la oportunidad de crear polémicas con mensajes y fotos cosificando a las mujeres. Kade, afiliada de la sala, criticó el fichaje y se llevó un exabrupto bastante machista de su «compañero». 12 meses después, el operador cerraba la cuenta de afiliada de Vanessa.
Este marzo, sin embargo, ha sido el de su revancha. GGPoker ha vuelto a elegir el 8-M para desvincularse de Bilzerian, y Kade además ha acabado cuarta en los Wynn Millions con un premio de 527.481$.
Tres horas duró la pelea entre los tres últimos jugadores, hasta que el finalista del Main Event de las WSOP Alex Livingston fue eliminado en tercera posición.
Aún quedaba plástico para alargar la partida, pero los protagonistas del HU empezaron una mano con un 4bet-call que formó una avalancha imparable de fichas propiciada por una mesa 7766 que ningún miedo le metía ni a los AA de Tony ni a las JJ de Isaac Kempton. El K del river no cambió nada porque el compromiso con el bote era demasiado grande.
Sinishtaj se lleva pateando el circuito estadounidense desde hace más de una década. El fruto de todos esos largos días de torneos y todos esos viajes se acercaba a los 1,8 millones de dólares en premios. El triunfo en los Wynn Millions casi dobla esa cantidad de una sola tacada.
Las fotos del campeón con el trofeo levantaron una polémica complicada de ver venir. En la foto en cuestión, Sinishtaj aparece impertérrito, como si se ganaran los Wynn Millions todos los días.
Este evento aspira a ser una referencia en el circuito y ofrecer una contrapartida invernal al Main Event de las WSOP, o al menos dejar pequeños a los clásicos de 10k del WPT y a otros aspirantes a citas ineludibles como el SHRPO.
Un premio que literalmente le puede cambiar la vida al ganador debería ser una herramienta de márketing casi inmejorable, y en vez de tener una imagen como la de un capitán de la campeona del Mundial levantando una copa entre confettis o estrellas del deporte besando o mordisqueando sus trofeos, pues la imagen es la que es. ¿Es tan difícil hacer atractivo al póker con esa capacidad de generar bolsas millonarias?
Menos mal que Stevan Chew encontró la forma más divertida de poner fin a la polémica y salvar el póker.
i saved poker everybody https://t.co/qKItO1mC9C pic.twitter.com/BCwsYQjLyB
— chu (@random_chu) March 14, 2022
