El Wall Street Journal ha publicado que el acuerdo para rescatar Full Tilt Poker por parte del grupo Bernard Tapie implicaría entregar participaciones de la empresa a los jugadores con más dinero congelado. Y es que la compra por parte de grupo francés supondría entregar más de 300 millones de dólares a los usuarios.
De esta forma, la sociedad oxigenaría un poco la inyección de capital, aunque queda claro que este acuerdo no parece resultar del todo beneficioso para los jugadores. Claro que muchos podrían verlo con buenos ojos, puesto que han dado el dinero por perdido.
Según el diario estadounidense, el abogado de Laurent Tapie , Benham Dayanim, informó que no se ha publicado la cantidad invertida por el grupo, aunque Bernard explicó a Le Figaro que apenas se acercaba al 5-10% del total de la empresa.
El escollo más importante que tiene ante sí la sociedad francesa es el Departamento de Justicia (DOJ). Una de las condiciones sine qua non que impuso el grupo Tapie para la compra de la sala fue que esta solucionase con el DOJ sus problemas.
Por el momento, el organismo estadounidense ha comenzado a entablar conversaciones con el grupo empresarial, que tiene que convencer al DOJ para que se levante la sanción de la UIGEA.