Lo decíamos en el titular de ayer. Muy pocas veces se da la circunstancia de que todos los protagonistas de la mesa final del evento principal de un festival tengan opciones a todo, como ocurría esta pasada noche en la PokerGO Cup.

Sean Perry tenía las herramientas en forma de fichas para desenredar la madeja, un lío de hilos que mantenía íntimamente enmarañados a Daniel Negreanu, Brock Wilson, Nick Schulman y Jeremy Ausmus, todos a tiro del reconocimiento, el trofeo y los 50.000$ asignados al campeón de la general.

El premio del torneo en sí, que no olvidemos que tenía un buy-in equivalente al premio extra que aporta la general, era mucho mayor, 640.000$.

El líder de la PokerGO Cup, Jeremy Ausmus, era el shortstack de la final del 50k$. Ahí residía la clave de la aspiraciones del resto de los presentes.

La primera eliminación, en un plano paralelo, resultaba ser doble. Por un lado, Daniel Negreanu mordió el polvo antes que nadie. Con ello abandonó toda resistencia a entregar su condición de defensor del título. De paso, los puntos de más que sumaba Ausmus al aumentar su suelo clasificatorio dejaban también fuera de la pelea por el festival a Nick Schulman.

El propio Schulman tampoco pudo sobrevivir al líder de la general. Desde la tercera posición, que fue la que finalmente ostentó el cada vez más favorito Ausmus, el único que le podía descabalgar del primer puesto era ya Brock Wilson.

Sin embargo, Wilson necesitaba sí o sí remontar la enorme diferencia en puntos que le llevaba Sean Perry en el heads-up para ejecutar su golpe maestro.

La diferencia era de 7:1. Perry, que buscaba rematar el festival igual que lo empezó, es decir, ganando, no se demoró en rematar la partida y convertirse en el juez último del campeonato de la PokerGO Cup.

Otro de los ganadores del festival, Nick Petrangelo, ha utilizado sus puntos para consolidar su liderazgo en el PokerGO Tour, que ahora encabeza por delante de Perry y Ausmus, en este orden.

Lo próximo en la orgía de High Rollers que componen este circuito es ir creando el ambiente adecuado para que el U.S. Poker Open descargue toda su batería de torneos, doce en total, a finales de marzo.

Antes, a finales de febrero, irá abriendo boca uno de esos fines de semana de torneos regulares en el Aria. El Wynn Millions 10k$, que aspira a ser el torneo de referencia de finales de invierno en el circuito estadounidense, será la transición ideal para una nueva maratón diaria de High Rollers.