«Este hombre tenía muy claro lo que estaba haciendo y lo que estaba intentando era robar el dinero del casino».
Son palabras de Justin Bonomo sobre el impostor de pelo rizado del Casino Aria. La historia no tiene desperdicio.
Un jugador anónimo se registró en un torneo de $125 del Aria y se sentó en las mesas del 25.000$ HR. En el foro de 2+2 aseguran que jugó 7 horas hasta que se dieron cuenta del error. Tenía un stack tres veces mayor al que empezó y ya había eliminado a 3 pros. El error, por lo visto, estuvo en el trabajador del casino que se equivocó al entregarle el ticket del torneo, pero él se quedó muy calladito.
«No dijo una palabra durante todo el tiempo, estaba con los auriculares y gafas de sol», explicó Bonomo. «Está bastante claro que él estaba tratando de salirse con la suya y no quería llamar la atención de nadie».
Pero aunque intentes ser invisible los números no mienten. 30 minutos después de cerrar el registro la organización se dio cuenta de que los números no cuadraban. «Tenía unos 300.000 puntos cuando se le acercó el director del torneo, que cogió su mochila. El hombre no le preguntó qué hacía, simplemente se levantó y le siguió de inmediato. Lo que me dijeron más tarde es que una vez salió de la poker room se escapó corriendo», manifestó Justin Bonomo.
El protagonista tiene ahora prohibida la entrada al local y su stack fue sacado de la mesa y retirado del torneo. Esta decisión pareció insuficiente para algunos jugadores, que piensan que deberían ser compensados. «El Aria debería hacer algo. Deberían hacer algo entre un reembolso completo o algún tipo de compensación para las personas que fueron afectadas», indicó Jason Mercier.
El anónimo jugador de pelo rizado ya tiene una historia que contar a sus amigos.
