Finalmente no ha podido ser y Raúl Páez no podrá participar en la mesa final televisada -en abierto para toda Francia- del Partouche Poker Tour de Cannes, en la tarde de hoy. Y es que la recta final de la jornada de ayer Sábado supuso un auténtico golpe para las aspiraciones de los jugadores que hasta esos momentos habían dominado el torneo, entre ellos Gus Hansen y el propio Páez. Empezaron la jornada los 48 participantes que ya se habían asegurado los premios, entre ellos Scotty Nguyen que llegó como shortstack y no pudo aguantar más que un nivel…
Todo iba bien para el español y en la mesa que compartía con Hansen su stack no se resentía. Poco tiempo después lo llevan a la mesa televisada donde permaneció varias horas compartiendo mesa también con dos jugadores franceses habituales de Peralada. En las horas que pudimos ver al campeón español en la TV Table, su stack no hacía nada más que crecer y su dominio en la mesa era claro. Sus rivales se jugaban sus stacks con manos realmente débiles y Páez entraba en contadas manos siempre para llevárselas. Páez alcanzó en esos momentos la tercera posición provisional en el torneo con más de 650.000 puntos.
El problema vino cuando se conformaron las dos últimas mesas y con 18 jugadores, algunos de éstos continuaron ese juego agresivo y acumularon stacks enormes; obligando a los interesados en llegar a la mesa final a tener que arriesgar un poco más de lo que lo venian haciendo hasta ese momento. Los jugadores de más nivel fueron los más perjudicados en ese contexto y fueron recibiendo golpes en jugadas bastante discutibles. Así los hermanos Mizrachi, Michael (14º) y Robert (15º) no tardaron en perder sus fichas y Raúl Páez, que se cruzó con dos manos de mala suerte: una con KQ en la que con la dama en el flop, se encuentra con un trío de doses… la otra un flip coin AQ vs 77 que lo dejó muy tocado por lo que tuvo que jugarse su escaso resto con Q-10 ante A-3 de un rival francés. Raúl se lleva 35,000$ pero se queda con el amargo sabor de boca que deja el quedarse tan cerca de poder optar a todo en una mesa final televisada en abierto en toda Francia y con un premio de 1,000,000 de euros para el primero.
Gus Hansen parecía en esos momentos el único en aguantar en esas circunstáncias, pero en apenas un nivel pasó de liderar el torneo a abandonarlo en novena posición, quedando así fuera de la mesa final en puesto de «burbuja». Un CALL solo explicable en el contexto de manos «extrañas» que se estaban viendo hasta ese momento fue el que hizo pasar a Gus del cielo al infierno en apenas unos segundos: Gus sube a 130.000 y un jugador francés Stephane Bazin resube… Gus vuelve a subir la apuesta y el francés va ALLIN por casi 1,200,000 puntos más…
Hansen piensa durante más de 10 minutos y ante la sorpresa general de los que veíamos las cartas en la pantalla (A6) decide pagar… el francés llevaba esta vez AK y no su habitual mano mediocre por lo que Hansen se quedaba muy mal en fichas. Su interés por acumular otra vez puntos le llevó a ser el siguiente en ser eliminado: 9º posición para el danés…
Hoy domingo se disputará la mesa final
Claudio Renaldi: 749,000
Michael Abecassis: 375,000
Jean Philippe Rohr: 750,000
Philippe Narboni: 1,456,000
Anthonin Teisseire: 541,000
Stephane Bazin: 2,387,000
Brice Cournut: 1,102,000
Alain Roy: 2,225,000
A destacar la presencia de algún jugador habitual del circuito catalán como es el caso de Alain Roy…
