Las últimas horas de la Super High Roller Bowl China están siendo una locura.
El periodo de registro se ha mantenido abierto durante unas cuantas horas del día 2, y pese a que las eliminaciones rondan la veintena y aunque por 270.000$ que cuesta la entrada el capital en fichas que reciben los jugadores que han hecho los últimos rebuys es solo de 10bb, no hay manera de dejar vacante una silla.
Adrián Mateos ha sido de los que ha tenido que abrir la cartera en el último segundo, y empezará a jugar el siguiente nivel con esas desesperadas 10 ciegas.
Los dos jugadores españoles han compartido mesa durante todo el día. Ninguno de los constantes cambios que realizó la organización para mantener equilibradas las tres mesas que llevan activas toda la tarde consiguió deshacer la pareja. Pero a 15 minutos del break que da por terminado el registro, Adri perdió la mano que le ha costado otro cuarto de millón.
Eliminado… perdi QJs vs A6o por 2.5m pot , AQs vs KJs por 4.5m pot y por ultimo perdi AQs vs KJo por 5.3m pot perdi los 5 allines pre hoy muy poco que hacer. #SHRBChina @Winamax
— Adrián Mateos Díaz (@Amadi_17) 21 de marzo de 2018
En la tele, hemos podido ver a jugadores como Fedor Holz o Shan Huang buscar el flip antes de que les cerraran el grifo, y a alguno se le ha ido la mano. ¡Holz ha sido eliminado seis veces ya en el torneo!
Ha habido un total de 17 recompras hoy, varias de ellas múltiples, y se han alcanzado las 75 entradas vendidas.
Sergio Aido daba cuenta de su situación, avisando de que van a cobrar 11. Lo que dice en su tuit coincide con lo que muestra la pantalla del streaming, 19 jugadores de 75 entradas. Empezamos la jornada con 27 jugadores, por lo que solo han sido eliminados ocho.
Llegué al final del periodo de reentries en la locura de la #SHRBChina … en mi tercera bala, 3.8M en media 7.6M. Quedamos 19 y cobrarán 11. @DrawingPoker
— Sergio Aido (@petgaming) 21 de marzo de 2018
A partir de ahora, entramos en la fase más técnica y complicada del torneo, en el reino del ICM y los rangos de push-call. Y los dos españoles siguen con vida.
¡A por ellos!
