Los reguladores del juego online en Italia y Francia han presentado los informes de sutiación del sector referentes al primer trimestre del año, con resultados divergentes.
Francia muestra un fuerte crecimiento después de mucho tiempo a la baja, mientras en Italia sigue el desplome.
Como noticia, es muy interesante ver que las cifras confirman las primeras impresiones sobre la bondad de la liquidez internacional. Ahora bien, como sorpresa, ni la más mínima. A estas alturas de la película, los mercados cerrados solo los defienden aquellos que calculan que que la apertura de fornteras podría dañar sus intereses. Básicamente moralistas o empresarios del juego físico de la vieja escuela.
Nuestros vecinos del norte, que ya disponen de oferta compartida con España, han visto crecer el GGR del poker online un 8,3% respecto a las cifras de 2017. Es una cifra que sufre por el abandono del cash por parte de los jugadores, que cambian de lobby para disfrutar del influjo de tráfico y dinero que han recibido los torneos gracias a la liquidez internacional. Así, las mesas de cash han arrojado números negativos, con una pérdida del 2% del tráfico, al contrario que los torneos, que han crecido un rotundo 15%.
El poker onine recupera el segundo puesto en importancia en el juego online en Francia, por detrás de las apuestas deportivas. Estas cifras serían muy mejorables si a la liquidez compartida le acompañara una reforma fiscal o si todas las redes aportaran más tráfico. Se han logrado simplemente con la adopción de las mesas internacionales por parte de un único operador, Pokerstars, y en el entorno de mayor presión impositiva de todos los mercados regulados en Europa.
En Italia, la fiebre que muestran todos los jugadores de poker por los torneos no está respaldada por una subida de los premios como en Francia, y por eso se estanca en un modesto 2%. Quienes no encuentran motivo para seguir aportando dinero al mercado son los jugadores de cash, y abandonan las salas en porcentajes superiores al 5% en cada trimestre. El saldo total es negativo, tendencia que era bien conocida tanto en España como en Francia antes de empezar a compartir mesas.
Ojalá la recuperación del poker online en el sur de Europa se mantenga durante el segundo trimestre del año, a punto de terminar, y se refuerce con el tercero con la adición de las mesas internacionales a nuevos operadores. Sería un argumento muy a favor de quiénes están todavía peleando por la apertura de los mercados en caladeros tan importantes como Estados Unidos, la propia Italia o Portugal y que podría animar a reconsiderar las políticas fiscales en países como el nuestro.
