El Dusk Till Dawn y el King’s Casino se han ganado una reputación en el circuito en vivo que les convierte en las poker rooms de referencia del continente europeo.
Los mejores festivales del planeta han solicitado sus servicios con regularidad, al menos hasta que la pandemia convirtió las aglomeraciones en las zonas de torneos en una actividad con un altísimo riesgo para la salud.
Dentro de los males que ha arrastrado el COVID, que han afectado a todos en mayor o mmenor medida, el DTD y el King’s Casino están viviendo realidades muy distintas.
La sala checa fue de las primeras, junto a los casinos austriacos, en retomar la actividad cuando pasó la primera ola. En Rozvadov se jugaron varios festivales antes de que las cifras volvieran a recomendar el cierre del ocio en recintos cerrados en la República Checa.
La noticia estos días es que, ahora que se atisba el final de la tercera ola, el gobierno checo ha vuelto a dar permiso para su reapertura, que se ha producido este pasado fin de semana.
Al otro lado del Canal de la Mancha, la realidad del Dusk Till Dawn es descorazonadora.
La Poker Room lleva cerrada 15 meses, y aunque no presente un estado de abandono, ni muchísimo menos, sí que es verdad que la gente de la zona se ha acostumbrado a que el club no atraiga el trasiego habitual de parroquianos.
El amplio aparcamiento del local es utilizado para que los aspirantes a motoristas hagan prácticas con la motocicleta y los vándalos se han sentido impunes para destrozar las cristaleras de la zona de fumadores que hay en uno de los lados de la nave principal, oculta por una arboleda.
El dueño del local Rob Yong compartió este vídeo en redes, con mejor humor del que cabría esperar por la noticia.
I know people wanna play some poker but this is a bit extreme to break your way in pic.twitter.com/iJAcRmJf0P
— Rob Yong (@rob_yong_) May 17, 2021
Juego responsable. El juego en vivo es una actividad de ocio regulado para mayores de 18 años.
