El dí­a arrancaba con Jonathan Duhamel ya clasificado matemáticamente para la final con 31 puntos y el resto con todo por decidir. Los otros 7 jugadores se encontraban en un pañuelo, con tan solo 5 puntos de diferencia entre todos ellos, lo que invitaba a pensar que la jornada serí­a de esas en las que los contendientes irí­an con el cuchillo entre los dientes, y efectivamente, la cosa no defraudó.

Duhamel, con la tranquilidad que da saberse clasificado, empezó a mover la mesa, queriendo asegurarse la primera plaza, situación que da derecho a un mejor stack inicial en la final. Fue entonces cuando se encontró con Daniel Cates «Jungleman«, quien con sus conectó una trucha en el flop, dejando farolear al canadiense que intentó un movimiento con que no salió. Aunque el board se complicó en florma de , fue difí­cil hacer creer a Cates que Duhamel pudiera haber conectado una escalera, la única mano que podí­a temer el americano. Al final, en el river, ambos jugadores se dieron check, y Cates se llevó un gran bote, que le sirvió para empezar a dominar la mesa a su antojo.

Pero lo «mejor» estaba aún por llegar. En una de las manos inmediatamente siguientes, Cates despertó todos los demonios de Phil Hellmuth dejándole treméndamente tocado. Hellmuth abrí­a una mano desde el CO con recibiendo la 3bet de Jungleman (ya con muchas fichas) en el botón con . El resto de la mesa se tiraba, y aparecí­a un flop en forma de . En el flop, Hellmuth jugaba al check/call ante la apuesta de su compatriota. En el turn aparecí­a un . Esta vez Hellmuth salió pegando, pero se llevó otro raise que no esperaba. El jugador con más brazaletes de las WSOP® se empezó a retorcer en su silla, pensando que Jungleman pudiera haber conectado full de nueves, pero al final pagó la subida. Cates tení­a muchos outs para llevarse la mano al showdown, y uno de ellos apareció. El cayó en el river, y Cates apostó medio bote. Hellmuth no se lo podí­a creer cuando después de mucho pensar, pagó para ver qué su rival habí­a conectado una escalera runner-runner que le poní­a con más de un millón de puntos, mientras su más inmediato perseguidor (Sam Trickett) apenas superaba los 300.000. Mientras tanto, Hellmuth, que se habí­a quedado con 100.000 ptos (20 ciegas), ardí­a en cólera y protagonizaba uno de esos discursos de tildamiento a los que nos tiene acostumbrados. Para relajarse, cogió su iPod y abandonó la mesa durante unos minutos. Hellmuth en estado puro…

Tras estos dos «pelotazos», la tarea para Daniel Cates fue coser y cantar. í‰l fue quien logró el triunfo en esta última jornada de la fase de grupos en el Grupo A, consiguiendo la clasificación para la mesa final por detrás de Jonathan Duhamel, quien consiguió asegurarse el liderato. A ellos dos les acompañarán con total seguridad Sam Trickett, que acabó ayer en 3.ª posición, misma plaza que ocupó en la general.

Por su parte, Scott Seiver (que habí­a empezado muy mal su actuación en esta Premier League) y Antonio Esfandiari lucharán por una plaza en la mesa final, siendo ambos jugadores los que acabaron en puestos de play-off, es decir, 4.º y 5.º.

No tuvieron tanta suerte Daniel Negreanu, Marvin Rettenmaier y el ya mencionado Phil Hellmuth, los cuales se quedaron fuera de toda opción, ya eliminados.

Sin más, estos fueron los resultados de la jornada de ayer en el Grupo A:

Y así­ quedó la clasificación tras cuatro jornadas, siendo estos los puntos definitivos cosechados por cada uno de ellos:

Puesto	Jugador	Premio	Puntuación
1.º	Talal Shakerchi	32.000$	16 pts
2.º	Tobias Reinkemeier	22.000$	11 pts
3.º	Dan Shak	16.000$	8 pts
4.º	Tony G	12.000$	6 pts
5.º	Jason Mercier	8.000$	4 pts
6.º	Igor Kurganov	6.000$	3 pts
7.º	Jennifer Tilly	4.000$	2 pts
8.º	Phil Laak	0$	0 pts

Puesto	Jugador	Puntuación (Jornada 3)
1.º	Tobias Reinkemeier	38 pts
2.º	Dan Shak	35 pts
3.º	Talal Shakerchi	26 pts
4.º	Jennifer Tilly	16 pts
5.º	Jason Mercier	10 pts
5.º	Tony G	10 pts
7.º	Igor Kurganov	8 pts
8.º	Phil Laak	7 pts