El World Poker Tour no necesita más evidencias para reconocer que el casino Seminole Hard Rock de Florida es su sede más exitosa de la era moderna.
Los 2.010 registros del WPT SHR Poker Showdown de 3.500$ de entrada son la segunda mejor afluencia jamás registrada en el WPT, a 470 de un récord que ya ostentaba este mismo torneo.
La abundancia de la oferta en vivo que existe en 2022 es infinitamente superior a la del año pasado, y aún así se han vuelto a alcanzar los 2.000 jugadores.
El fin de semana se ha dedicado a acomodar a todo el mundo en el salón de torneos y que empezaran a generarse las primeras eliminaciones. El field se ha encogido ya hasta 99 jugadores, en el transcurso de los dos días 1 y la reunificación. La burbuja ha estallado durante este proceso, y ha pillado a dos jugadores españoles en puestos premiados.
David Comerón se ha llevado 6.000$ por el puesto 186º.
Del segundo, Javier Zarco, todavía no podemos ofrecer una cifra exacta para su premio, porque sigue en la partida.
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— Javier Zarco (@zarco1128) April 11, 2022
A Javier nos lo hemos encontrado además en una situación casi inmejorable, chipleader de su mesa para el día 3 y séptimo en la general.
De mantener este extraordinario resultado, Zarco estaría destinado a cobrar más de 100.000$, cifra que se alcanza con el 10º puesto. En caso de resultar campeón, habría que añadir un cero, 1.030.000$.
Sus rivales de inicio de día 3 tampoco tienen el nombre de otros supervivientes del torneo. En la lista hay ocho campeones del WPT, encabezados por el tetracampeón Darren Elias y el vigente WPT Player of the Year Jake Ferro. El italiano Alessio Issaia, también ganador de un WPT, es uno de los pocos europeos presentes. La campeona Ema Zajmovic y Kitty Kuo son las más conocidas de las cuatro mujeres de la lista.
A pocas ciegas de Javier Zarco se encuentra el actual número 2 del GPI Shannon Shorr, que está escoltado muy de cerca por Christian Harder y Jeff Madsen.
Ese es, a grandes rasgos, el panorama que se encontrará el madrileño esta tarde. Le deseamos, como poco, que todo le vaya igual de bien que ayer. ¡Suerte!
