Las Vegas, la principal capital del juego y de las apuestas deportivas en Estados Unidos, no tenía ni un solo equipo profesional de las grandes ligas como residente en la ciudad hasta hace apenas un año.
Los Vegas Golden Knights de la NHL, la liga profesional de hockey, han roto el hielo con resultados extraordinarios. En su primer año de vida, su pabellón ha registrado llenos absolutos noche tras noche y deportivamente han ofrecido el mejor rendimiento de un equipo de expansión en la historia de todas las grandes ligas alcanzando la final de la Stanley Cup.
Ahora que el ostracismo al que el deporte profesional sometió a Las Vegas ha desaparecido por completo -la NFL ya ha aprobado que los Raiders se trasladen a Las Vegas-, la ciudad se ha convertido en el foco principal de atención de los comisionados de todas las ligas.
La liga profesional de béisbol, la MLB, ya ha hecho oficial su interés en acometer una expansión de su campeonato. Se sumarían dos franquicias nuevas a las 30 existentes hoy en día. Por supuesto, Las Vegas parte como favorita para ser la sede de una de ellas.
Ahí es donde entra en juego el Casino Rio.
Uno de los grandes atractivos de Las Vegas para el deporte profesional es la relativa abundancia de inversores dispuestos a dotar de nuevas infraestructuras a una franquicia. La creación de un equipo de béisbol en Las Vegas llevaría aparejada la construcción de un nuevo estadio, un nuevo «diamante», que es como se conocce en la jerga deportiva a la parte interior del campo de juego.
En el blog VitalVegas, que cubre toda la actividad social y empresarial de la ciudad, especulan con la futura ubicación del estadio, El último rumor indica que podría ocupar el solar del casino Rio, que sería demolido.
We’ll up the ante on our Rio sale rumor with another juicy tidbit: As we’ve shared, could very well be a land play. New rumor suggests Rio could be demolished, site to be developed as (wait for it) Major League Baseball ballpark.
— Vital Vegas (@VitalVegas) 8 de octubre de 2018
Las WSOP no corren peligro alguno. Su nueva casa está en construcción, y el traslado planeado desde hace unos meses. La única incógnita que quedaba era cómo se las arreglaría Caesars para encontrar un comprador para el Rio y cómo haría este nuevo dueño para amortizar la inversión.
Todo cobra mucho más sentido si lo que está realmente en venta es el solar, y no el recinto. Incluso hace que otras piezas encajen en el puzzle, como la fuerte inversión que hizo Station Casinos en la compra del Palms. Los terrenos del Palms son adyacentes a los del Rio. La operacón de Station no buscaba la gerencia del Palms, sino especular con los terrenos. Y la del Palms no es la única finca aneja al Rio que ha despertado un súbito interés entre los especuladores.
There’s been a spike in investor interest in parcels around Rio. The speculation part: If an MLB ballpark plan is in the works, it’s an «Aha» moment for why Stations has invested so much in Palms when it can’t possibly recoup the investment—unless they know something we don’t.
— Vital Vegas (@VitalVegas) 8 de octubre de 2018
La nostalgia no tiene cabida en el mundo de los negocios. El escenario de hitos como el mayor premio de la historia del poker, el del Big One for One Drop de 2012, puede estar destinado a desaparecer an breve. Pero la vida sigue, y las WSOP también seguirán. De eso no hay duda.