Fin del día 1A del EPT de Deauville; De La Gorce es el chipleader

El Dí­a 1A del PokerStars European Poker Tour de Deauville llegó a su fin, con el local Guillaume De La Gorce (196.800) en lo más alto del chip count.

En total, 419 jugadores tomaron asiento en el primer dí­a del evento principal con la intención de amasar un gran número de fichas, con el que poder avanzar al Dí­a 2. Entre los que lo lograron, los miembros del Team PokerStars Pro Julien Brecard (41.800), Christopher De Meulder (40.400), Matthias de Meulder (39.800), Thomas Bichon (28.000) y Marcin Horecki (22.300). Los que también se dejaron ver por Normandí­a fueron: el vigente campeón Jake Cody (eliminado), Steve van Zadelhoff (82.000), Antoine Saout (104.100), Nico Calia (65.700), Praz Bansi (52.300), Pierre Neuville (45.800), Rui Cao «PepperoniF» (44.900), el gran «amigo» de Juan Manuel Pastor, Ludovic Lacay (40.100), el luso Fernando Brito «NANDO368» (18.900), lí­der de la clasificación de mejor jugador del EPT del año, quien aprovechó sus horas de sueño para terminar en segunda posición en un 109+R, por el que se embolsó 12.000$ y el ex seleccionador francés Raymond Domenech (12.100).

Otros jugadores del Team PokerStars Pro no corrieron la misma suerte que sus compañeros. A saber: Vicky Coren, Theo Jorgensen, el creador del European Poker Tour, John Duthie, y la amiga de PokerStars Fatima Moreira de Melo.

La eliminación de Fatima fue una verdadera lástima.

En cuanto a los jugadores españoles, la jornada resultó fructí­fera. Nuestra Leo Margets, recientemente nominada a los European Poker Awards, lidera la «Armada» en el paí­s vecino. Con 68.400 fichas, la catalana consiguió pasar el corte en una cómoda posición. Tras ella, Fernando Valenciano (62.500), David Pérez (34.900), David Morante «Gorrioncillo» (32.700), quien seguro que aprovechará el dí­a de descanso para ver a Rafa Nadal, José Martí­nez (28.100), Alberto de Mingo (21.700) y Óscar Blanco «La Púa» (19.300).

Leo vuelve a estar al frente de la «Armada».

Hoy se disputa el dí­a 1B en el que, a buen seguro, la representación española dejará el pabellón bien alto.