Este domingo traemos un artículo extra, un especial dedicado a la comunidad de poker que tanto amamos, concretamente un rostro femenino muy conocido y no solo por su belleza, sino también por su talento y atención con las cartas. Se trata de la jugadora inglesa Liv Boeree, también apodada «The Poker Queen«, la única mujer ganadora de un brazalete de las WSOP y un EPT, entre otros grandes premios conseguidos en el mundo del naipe a lo largo de su carrera.
Así pues, aunque muchos de nosotros ya sabemos mucho sobre ella, hablaremos también sobre su vida personal y privada, o no tan privada. Olivia «Liv» Boeree nació el 18 de julio de 1984, en Hollingbourne, en Kent (Inglaterra) y fue estudiante honorífica en el grado de Física y Astrofísica, en la Universidad de Manchester. Además, mientras cursaba sus estudios, se entretenia tocando la guitarra en varias bandas de musica heavy, de la cuales era la lider, y también modelaba para diferentes marcas de ropa, como Alchemy Gothic.
Sin embargo, Liv se apasionó por el poker a través del reality-show de Ultimatepoker.com llamado Showdown, del cual fue seleccionada en 2005 y en el que se encontró con jugadores top del mundo de poker como Phil Hellmuth, Annie Duke y David Ulliot. Añadiendo su primera victoria que tuvo en el «2008 Ladbrokes European Ladies Championship» en ese mismo año, decidió convertirse en jugadora de poker profesional y llegar a eventos como el EPT, en el que en 2010, fue la campeona del «Main Event» en Sanremo, en el que se embolsó 1,250,000€, consiguiendo además el título de la 3a mujer en ganar un EPT en la historia del poker.
Pero además, como ya dijimos, también en 2017 ganó el primer puesto compartido con su actual pareja sentimental, el jugador ruso Igor Kurganov, y que ambos alzaron sus brazaletes del ganadores en el torneo «$10,000 Tag Team No-Limit Hold’em Championship«, en las WSOP de Las Vegas, llevándose $273,964 de premio total. Y eso no es todo, porque justo después del evento, ambos jugadores decidieron donar la mitad del premio del torneo a la ONG de Igor, REG Charity.
A partir de entonces, la británica no ha dejado de aumentar su carrera de éxitos obtenidos en el poker: como la victoria del «Poker After Dark«, también en 2017, su runner-up en el «2014 UKIPT Edinburgh Main Event» o el 3r puesto en el «EPT Barcelona High Roller» en 2015. Así pues poco a poco, fue consiguiendo logros cada vez más significativos, incluyendo su incorporación como miembro del Team PokerStars Pro en septiembre del 2010, y participación como Team Manager en el Global Poker League llamado «The London Royals» en 2016. Mientras tanto, su bolsillo también iba creciendo llegando a la suma de $2,800,000 en ganancias totales de torneos en vivo, registradas en Global Poker Index. Sin embargo, en 2019 anunció por Twitter que dejaba PokerStars Team Pro después de 9 años y que se retiraba del mundo del poker profesional.
Por suerte, este pasado diciembre de 2024, volvió a los tapetes apareciendo de nuevo en las WSOP Paradise en Bahamas, demostrando que no habia perdido su valía como jugadora llegando a la FT del «$25,000 WSOP Super Main Event«, el cual fue televisado y seguido por todos los amantes del poker, y en el que se hizo con la 4a posición del torneo junto con $2,800,000. Pues bien, la semana pasada, como bien anunció en la entrevista que le hicieron después de su participación en el torneo de las Paradise de Bahamas, escribió por Twitter que donaría $500,000 del premio al cuidado y crianza de cerditos y otros animales.
Así pues viendo el pedazo de corazón que tiene Liv, como no iba a ser menos debemos comentar que en 2014 se unió como cofundadora del Raising for Effective Giving, una asociación que promueve de manera altruista, ayuda especial a organizaciones de caridad que la necesiten, y que la hizo miembro del Giving What We Can obteniendo como recompensa el Doctorado de Ciencias «Honoris Causa«, en la Universidad de Hull en 2023.
Para finalizar también añadiremos sus participaciones «extras» durante su trayectoria en el mundo de poker, en el que también ha dedicado tiempo, como a la televisión y a la radio, siendo el mejor ejemplo su colaboración en el «Win-Win Podcast«, programa en el que es invitada especial.
Y esto es solo un resumen, ya que ahora que hemos visto a Liv otra vez en el rodeo, podemos suponer que no tardaremos mucho tiempo en verla destacar alzando algún premio que otro en este año 2025.
Good Luck Liv!
