Ayer no perreamos tanto, pero casi alcanzamos el nivel del día anterior. Hasta las 6 de la tarde el día fue idéntico con la variante de que Pac8ito se quedó en nuestra habitación echándose una siesta. También Alvarito y yo hicimos cosas distintas pero pocas.
El nuevo spray solar lo hemos bajado a protección 25 ¡Con un par! Tizona tiene la garganta tocadilla (Bidan y Doormangore, no hagáis el chiste fácil, que os veo) se compró unas cuantas pastillitas y una especie de Bisolvón asquerosote.
Pasamos por el Spa para ver como estaba el tema de los masajes y nos partimos de risa al comprobar en la lista que hay uno especial pre-natal. Nos faltó un pelo para pedir hora a Pac8ito.
Qué pena no llevar la cámara a la piscina porque me iba a forrar vendiendo las fotos de Tizona con una botella de agua. Yo me estoy aficionando a la Red Budweiser. Nuestra perdición ha sido el descubrir que la barbacoa de la piscina está de lujo. Lo que nos faltaba para no salir de aquí. Ya vemos el título de la película: Atrapados en el Flamingo.
Nos acercamos a la piscina infantil, que tiene tobogán, pero ven cierto parecido de Tizona con Michael Jackson y nos impiden la entrada. Por cierto, por aquí se comenta que Michael a muerto ¡La madre que los parió! No paran con el negro/blanco de las narices. Que si el testamento, que si la criada le dio unos pastillones de clembuterol adulterados,…
Ya en la habitación decidimos no ir al Río, porque Miky no está en mesa final y prácticamente ya no hay acción hasta el día 3 de julio, día de mi debut. Aquí os dejo una foto de lo que me espera. Y eso es sólo una vista parcial de una de las salitas del Río.
Nos llama Mena diciendo que está en el Flamingo con Alejandro. Se van de compras y nos dicen que hay algún españolito en el Caesarâ€s jugando un torneo de 330 $ que empezó a las 16:00. Parece ser que sigue vivo Germán. Aquí lo tenéis con Armando Muñoz-Calero y Kokoliso en las gradas de alguna sala del Río.
Antes de ir al Caesarâ€s pasamos por el Oâ€sheas para que Pac8ito le meta combustible a su cuerpo serrano. Alvarito y yo nos vamos a tomar una cervecita allí mismo a unos metros del BurriKing. Aquí empieza una nueva sección de este viaje: Beer Pong. Se trata del juego/deporte más gilipoyas que os podéis echar a la cara. En este video vienen las reglas (más o menos).
Este es un deporte del que ya pudimos disfrutar en el viaje de abril. Yo me jugué una partidita con Jorge Vales Doormangore y le pegué una soberana paliza.
Lo que hemos descubierto en esta ocasión es que se trata de un «deporte» con sus reglas y unos campeonatos de mil pares de narices. La casualidad quiso que viéramos un anuncio de las WSOBP. Sí, sí habéis leído bien, las World Series Of Beer Pong. Realmente lo que nos llamó la atención del anuncio fue el siguiente fotograma.
Me metí en la web de las WSOBP y me pegué un paseo por las reglas. Ya la página principal me deja filpao. A la derecha podéis ver que hay hasta mesas oficiales, pero si buceas un poco también te venden las bolas, vasos, gorras, etc. Leyendo las reglas entiendo la foto de las chatas. Resulta que puedes hacer maniobras de distracción para desconcentrar al contrario. También te penalizan si, ante semejante vista tiras todos los vasos con tu miembro viril.
Esta tarde a las 4:00 hay un campeonato de Beer Pong en el Oâ€sheas. Nuestro equipo oficial estará formado por Pac8ito y servidor. íl jugaba a baloncesto y muy mal no se le tiene que dar, yo ya tengo práctica de mi pasado como trilero en los bares de nuestro país jugando con el duro y el vasito de chupito. Ahí va una imagen con las distintas mesas oficiales y una cajita de bolas.
Casi todos los jugadores tiran la pelotita directamente al vaso, yo la hacía botar primero en la mesa y por eso le pegué la paliza a Doormangore. Ya me veo pasando el fin de año en Las Vegas, porque las WSOBP se juegan en el Flamingo del 1 al 5 de enero. Si alguno de mis hermanos lee esto que vaya a mi casa y se lleve todos los cuchillos, tijeras, incluidas las de podar, y cualquier otro objeto punzante o susceptible de ser usado como cortapenes. No me haría gracia que mi mujé empezara a ensayar.
Ya en el Caesarâ€s no encontramos a ningún españolito y nos sentamos a gamblear en la inmensa Sports Room, es decir, la sala de apuestas. No confundir Room con Rum, al que tanta afición tenemos algunos. Yo no, claro, soy más de gí¼isky. La primera vez que entré aquí hace dos años me quedé A-L-U-C-I-N-A-N-D-O en colores. Es más grande que la Catedral de Burgos y tiene 4 ó 6 pantallazas de unas 258.000 pulgadas. Debajo de ellas otras 10-12 más pequeñas, de sólo 100.000 pulgadas. También hay paneles gigantes en rojo y verde que van mostrándote las apuestas.
En la sala hay unas 50 mesitas con unos sillones tan cómodos que podrías quedarte a vivir una semana porque, además, en cada mesa hay una pantalla de unas 15 pulgadas en la que puedes seleccionar el canal para ver los distintos eventos. Nos centramos en las carreras de caballos, pero al no haber ninguna pronto tuvimos que gamblear con las cuádrigas y con los galgos.
En la primera apuesta ya empiezan las discusiones. Tizona quiere ir a por lo gordo, a por el carrito mejor pagado con unas odds de 90 a 1. Ya esperábamos ver a una abuelita con el dorsal número 6 cargando con un carrito del Carreful mezclada entre las cuádrigas. Pac8ito y yo nos decantábamos por el dorsal número 8 o por el que pagaran 8 a 1.
Finalmente apostamos por el número 2 para ganador y segundo. Era el segundo en las apuestas, pero el muy cabrón tuvo un mal día y llegó el penúltimo. Para más inri, destacado pero por detrás. Hacen una repetición inmediata de la carrera y tuvieron que esperar 4 minutos en esta ocasión para que apareciera la llegada del nuestro ¡Redios, elegimos al tipo que hizo un experimento con las ruedas cuadradas! En el video se puede ver el descojono y lo palurdos que somos. Creíamos que quedaban 2 vueltas más, jojo.
Pasamos a los galgos y nos descojonamos al ver al dorsal número 7 con la camiseta del Betis. Cada dorsal tiene un color y el 7 siempre va a rayas blancas y verdes. Apostamos por el 7 y por el tal . Pues nada, el 7 corrió mirando al tendido, el tal tampoco parecía muy dispuesto a perseguir al conejito. Cuando vayamos al Play Boy Club veremos si nuestros galgos se fijan en las conejitas.
Finalmente voy yo a apostar. Me recuerda a mi película favorita: El Golpe. Me veía como Lonnegan (Robert Shaw) a punto de ser timado por Henry Gondolf (Newman) y Johnny Hooker (Redford-Barros). Pagaban 8 a 1, pero al empezar la carrera nos aparece 6 a 1. La cuádriga elegida es la 6 de Lady Jane B. En el video podéis ver lo que pasó.
Finalmente sí que nos timaron, porque cuando fui a cobrar sólo nos pagaron 27 pavos. No os perdáis los videos porque demuestran que somos unos putos pardillos y gamblers. Acabo de ver los videos y llevo una media hora descojonao.
Ha llegado Jairo, tabaco y to eso. Nos lo llevamos a desayunar porque tras el viajecito lleva una caraja del 8 como os cuenta en su crónica.
Habitacíon 25162, Hotel Flamingo, Las Vegas (Nevada). 1 de julio 2009.