La comisión de control de Juegos Alderney ha acaparado una gran atención con las consecuencias del caso FullTilt Poker y no es para menos.
La conclusión de la investigación de la AGCC finalizó con la suspensión de la licencia de Fulltilt Poker y puso al descubierto la difícil situación financiera de la sala de poker, que una vez fue la segunda más grande del mundo. Todo esto fue debido a la mala gestión durante un período de cuatro años.
Durante este período, hubo un incumplimiento sistemático, por parte del regulador, para detectar o actuar sobre el sangrado continuo sobre los fondos de los jugadores. La decisión final de revocar la licencia se encontró con un llamamiento colectivo de «muy poco y muy tarde» de los medios y jugadores de poker.
Barry Carter, periodista y escritor, dijo: «Qué hace un regulador para no ver un déficit de 331.000.000$ en la cuenta de una empresa durante más de 4 años. ¿No es el trabajo de un regulado auditar periódicamente a una empresa con millones de dólares en dinero de sus clientes en lugar de aceptar lo que se puede consultar al finalizar el año fiscal?«.
Además de todo esto, hay una parte de la historia de la que casi no se ha hablado. La Autoridad de Regulación de juegos online «ARJEL», es independiente del cuerpo administrativo de Francia para regular la nueva ley, aprobada en el país galo en 2010. Los operadores que deseaban seguir ofreciendo sus servicios a los jugadores franceses tenían que solicitar una licencia a «ARJEL«, cumplir una serie de estrictos requisitos y pagar una alta suma en impuestos.
En agosto de 2010, Full Tilt Poker abrió su sala bajo el .fr, totalmente autorizado y regulado por «ARJEL» bajo el nombre «Rekop limitada«. También fue en agosto de 2010 cuando Full Tilt pagó enormes dividendos a sus accionistas y se incautaron millones de dólares en las operaciones contra los procesadores de pagos. Es decir, cuando «ARJEL» concedió la licencia, la sala ya se enfrentaba a graves problemas de liquidez. El dinero de los jugadores franceses estaba separado del resto pero los fondos no estaban, en consecuencia, el jugador francés estaba en la misma situación que los jugadores internacionales, sin un dólar en su bolsillo.
En julio de este año, «ARJEL» suspendía la licencia imitando así a Alderney, solicitando semanas antes a FullTilt que volviera a proveer servicios, por supuesto la sala no lo hizo. También se solicitó información financiera para demostrar que no existían fondos suficientes para cubrir los depósitos de los jugadores.
Los jugadores franceses pagan un alto precio en impuestos por el poker online regulado. Sin embargo, el pago de estos impuestos no han traído consigo la protección esperada. Muchos países han utilizado el ejemplo de Fulltilt Poker para demostrar la necesidad de legalizar el poker, pero ARJEL proporciona un ejemplo claro de que la regulación gubernamental no es un arma que garantice la protección de los jugadores.
